La mayoría de las órdenes del DOS están relacionadas con el almacenamiento y la gestión de los datos en el disco. Para lograr este objetivo, el DOS utiliza una estructura arborescente basada en tres elementos fundamentales: discos, directorios y ficheros. Los discos son las unidades de almacenamiento, los directorios son compartimentos que se crean en el disco para una mayor organización, y los ficheros son los datos que se almacenan en los directorios del disco.