SINCRONIZACIÓN DEL FLASH ELECTRÓNICO CON OBTURADOR CENTRAL

El destello del flash electrónico es instantáneo a la descarga eléctrica de su lámpara, por lo que sólo es posible utilizarlo ajustando el obturador en "X".

Ocurre, sin embargo, que como el destello del flash electrónico es tan extremadamente corto (1/300 de segundo en los más lentos, hasta 1/10.000 de segundo y menos, en los más rápidos), puede darse la posibilidad de que por defecto de construcción o por desgaste natural, la cámara dispare el flash cuando las laminillas del obturador se están abriendo o cuando se están cerrando, lo que conduce a una exposición errónea.

Si utilizamos el flash electrónico de destello muy rápido, la abertura que en ese instante tengan las laminillas del obturador, será el diafragma efectivo. Si por el defecto dicho en el párrafo anterior, la postura de las laminillas forman una abertura equivalente a f/5.6 en el momento del destello, podremos, si lo deseamos, trabajar a un diafragma más cerrado que éste, pero si tuviéramos necesidad de mayor abertura, no podríamos conseguir ninguna de más luminosidad a la dicha de f/5.6 porque por mucho que abriéramos el diafragma, en el momento del destello el obturador se encontraría en la postura equivalente a f/5.6 siendo inútil que el círculo diafragma esté más abierto.

Si el flash fuera de los de tipo lento y cogiera a las laminillas mientras se abren, hay gran posibilidad de quedar aprovechada la casi totalidad de la luz, aunque es muy difícil asegurar en qué proporción.

Si tenemos la más mínima duda de la sincronización de nuestra cámara con el flash que usemos y creemos que el destello no se produce en el instante en que el obturador está abierto al máximo, es recomendable la lleve cuanto antes a un mecánico especializado para que se le ajusta, lo cual es relativamente sencillo y barato.

Ocurre a veces que, siendo la cámara nueva, no esté adaptado su sincronismo al del flash elegido, con alguno de los defectos ya dichos. Vuélvala a llevar a la casa donde la compró y si es en un establecimiento de garantía, se encargarán en hacerle el reajuste preciso.

La cámara fotográfica y el flash son aparatos de gran delicadeza y no es aconsejable en ningún caso sean comprados de segunda mano. Por muy económica que pueda encontrar una ocasión, al final le saldrá caro en disgustos y preocupaciones, la poca garantía que le ofrece algo que ha llevado un uso tal vez despreocupado y descuidado.