Cuando se desea tratar gases que contienen contaminantes con diversos grados de oxidación, pueden aplicarse simultáneamente la oxidación y la reducción catalíticas en un proceso denominado genéricamente conversión catalítica. Para ello es necesario utilizar catalizadores combinados, como los llamados catalizadores de tres vías, utilizados para tratar los gases de escape de los automóviles, transformado sus tres contaminantes principales, hidrocarburos, CO y NOx en CO2, agua y nitrógeno.
El uso de convertidores catalíticos en los automóviles implica prescindir de los aditivos de plomo (envenenamiento del catalizador) e instalar un dispositivo de control de los gases de salida del motor (sobrecalentamiento del catalizador).